Colectivos de Lo Campano piden un plan sobre los hábitos de higiene

Grupos de acción social reclaman a la alcaldesa apoyo para reformar casas y el local social 06.05.09 - EFE CARTAGENA/ la Verdad

Responsables y voluntarios de los dieciocho proyectos de acción social que están en marcha en el barrio de Lo Campano, una de las zonas más deterioradas de Cartagena, plantearon ayer a la alcaldesa, Pilar Barreiro, el mal estado del local socia, la falta de espacio y la necesidad de poner en marcha un proyecto educativo de salud para los residentes. Libros que «curan» en la Botica del Libro, el Café Joven, un espacio para ofrecer alternativas de ocio, cursos de cualificación profesional, la web del barrio, aula de educación de adultos o meriendas saludables para los más pequeños son algunos de las iniciativas educativos y de acción social dirigidos en la barriada por medio centenar de voluntarios y profesionales integrados en el grupo denominado B-612. Antonio Ortiz, de la empresa Promove, explicó que la visita sirvió para plantear a Barreiro deficiencias como el deterioro de la cubierta y ventanas del local social del barrio, que «pueden comprometer a corto plazo la seguridad estructural del edificio». Otra de las demandas del grupo es un servicio de promoción de salud e higiene personal para los habitantes de la barriada. Han detectado «deficiencias en los hábitos de higiene y aseo de muchas familias debido al deterioro general en las infraestructuras de las viviendas». Programas municipales El colectivo B-612 propuso usar instalaciones municipales abandonadas, como algunos pabellones de la escuela infantil San Isidoro. Quieren trasladar allí programas educativos como «la botica infantil» o «el club Principito» y ganar espacio en el local social. La alcaldesa alabó a estos colectivos y se comprometió a analizar las demandas vecinales. Además, recordó que el Ayuntamiento mantiene actuaciones como el proyecto de biblioteca-ludoteca para sesenta niños de 6 a 12 años y el proyecto Mujer Gitana, para 52 mujeres, en colaboración con Cáritas Interparroquial; y el taller de promoción de la mujer, donde 29 alumnas de 16 a 60 años participan en talleres de cocina, costura o alfabetización junto al grupo de voluntariado de San Vicente de Paúl.