Ministerio de Medio Ambiente y Comunidad llevan años sin concretar el pacto de gestión del Mar Menor
17.10.11 - 01:20 - JOSÉ ALBERTO GONZÁLEZ jagonzalez@laverdad.es | CARTAGENA.
Con un cielo despejado la mayor parte de los días y unas temperaturas altas que invitan en pleno octubre a disfrutar de los últimos coletazos del verano (oficioso), en el litoral del Mar Menor se va cerrando una temporada de baños que entre otras cosas se ha caracterizado, para mal, por los problemas ambientales en toda la ribera, incluida La Manga. Ha habido plagas de medusas y babosas, vertidos de aguas fecales, contaminación del agua por restos de nitratos de la agricultura y estériles mineros a través de las ramblas, barcos fondeados junto a zonas de bañistas, fango y algas cerca del club náutico de Los Urrutias...
Aunque ha habido algún alivio puntual como la retirada de espigones, la principal joya turística y una de los tesoros ecológicos de la Región sigue acusando la falta de acuerdo entre las distintas administraciones públicas de cara a establecer un plan de gestión integral del mar interior y su ribera con unos criterios comunes, un calendario de actuaciones a corto, medio y largo plazo y un presupuesto.
En los últimos días, las declaraciones y movimientos públicos de responsables de los niveles local, regional y nacional han evidenciado que, además de las restricciones económicas por la crisis, el principal problema que lleva años frenando la firma de un pacto por el Mar Menor es el desencuentro político entre PSOE y PP. Si este último gana las elecciones generales del 20 de noviembre y hay un cambio de gobierno a nivel estatal, la situación puede dar un giro y propiciar el entendimiento. Pero a día de hoy, el hecho constatable es que el Ministerio de Medio Ambiente y la Comunidad Autónoma, siguen acumulando años sin ser capaces de firmar el pacto del que todo el mundo habla y que nadie saca adelante.
Paralelamente, ambas administraciones siguen aumentando la demora de proyectos comprometidos de forma previa a la negociación de ese acuerdo, propiciado en 2007 por la convocatoria por parte del Ministerio de la 'Comisión Mar Menor'. Ésta solo se ha reunido dos veces (la primera antes de las elecciones municipales de hace cuatro años) y apenas se ha concretado en acciones como que la Demarcación de Costas del Estado en Murcia, que dirige Francisca Baraza, envió en otoño pasado a dieciocho organismos un informe con propuestas de intervención en el Mar Menor. Costas no accede a difundir el contenido ni aclara si maneja un presupuesto. A día de hoy, ocho entidades ni le han respondido.
El grueso de los planes retrasados es de la administración central, y se enmarcan en el llamado Plan Nacional de Calidad de las Aguas. Los ajustes presupuestarios mantienen congelados dos proyectos.
Obras de un plan nacional
En el caso de la CHS, se trata de la construcción de una red de tuberías y tanques de tormentas para desviar Mar Mediterráneo las aguas de arrastre de lluvia, para evitar que contaminen el Mar Menor; y la ampliación del cauce de la rambla de El Albujón. Y en el de Acuamed, las infraestructuras de reutilización de aguas de depuración en la zona norte del mar Menor: San Pedro del Pinatar, San Javier y Los Alcázares.
La CHS explica que el proyecto de las tuberías, valorado en 45,4 millones de euros, está pendiente de que el Ministerio habilite una partida para realizar la declaración de impacto ambiental. Ésta no estaba prevista, pero el Gobierno ha accedido a hacerla tras una petición de la asociación ecologista Anse, que esgrimió la envergadura de una obra que supondría abrir zanjas para meter una red de 48 kilómetros de conducciones. Los ecologistas se oponen al proyecto porque supondría arrojar al mar hasta 49 hectómetros cúbicos, y plantean como alternativas tratar esa agua en desalobradoras para reutilizarlas en la agricultura o crear «filtros verdes» o humedales artificiales como en la Albufera de Valencia.
La CHS reconoce que no ha planteado una desalobradora, pero la ve posible en el futuro para aprovechar el agua en cultivos. Respecto a agrandar el cauce de la rambla de El Albujón, no aclaró en qué fase está el proyecto, anunciado tras las inundaciones de septiembre de 2009.
La idea es invertir 84 millones de euros para ampliar todos los puentes y viaductos sobre el cauce a lo largo de 40 kilómetros, para triplicar la capacidad de canalización, que ahora es de 250 metros cúbicos por segundo.
¿Nadie quiere 11 hectómetros?
Se ampliaría el cauce superior hasta una anchura de 45 metros, aproximadamente una decena más que ahora, desde el arranque en Cuevas de Reyllo hasta la desembocadura en Los Alcázares.
En cuanto a Acuamed, la empresa pública asegura que los tres proyectos informativos para la canalización de aguas están redactados y pendientes de pasar a información pública. En todo caso, a través de un portavoz ha hecho ver que «por el momento no hay interés en la realización por los beneficiarios».
Acuamed explica que «hasta el momento, no se han podido firmar, ni los usuarios han instado a ello, los convenios de usuarios previstos en la legislación vigente» para tramitar las obras. A su juicio «no hay retrasos ni dilación en las obras, y Acuamed seguirá intentando llegar a acuerdos con dichos usuarios».
La empresa afirmó que no han mostrado interés en reutilizar el agua depurada ni los ayuntamientos de San Pedro, San Javier y Los Alcázares, ni las comunidades de regantes ni los propietarios de un campo de golf no identificado. En el limbo queda la posibilidad de utilizar de 7 a 11,8 hectómetros cúbicos al año, según Acuamed.
Lucha entre PP y PSOE
En el debe de la Comunidad Autónoma ha destacado hasta agosto la aprobación el plan de control del vertido de nitratos sobrantes de los campos de cultivo, donde los agricultores están cada día más concienciados sobre los efectos del uso de productos químicos y han reducido su uso de forma significativa.
Al margen de la medidas unilaterales, falta el pacto global tras años de luchas políticas. Desde el Ministerio, aseguran que el problema es que «la Comunidad se orienta más a un convenio con una relación de obras a acometer por ella y el Ministerio por encontrar criterios y objetivos comunes de gestión y coordinación efectiva en las actuaciones de cada uno, en cumplimiento de sus competencias; es decir, por buscar las bases de una gestión integrada y compartida».
Desde la Consejería de Presidencia, que ha asumido las políticas de medio ambiente (estaban en Agricultura y Agua), el consejero Manuel Campos dice que buscará el acuerdo con el Ministerio. Y ha pactado con los municipios del Mar Menor (gobernados todos por el PP) la hacer una ley de protección integral y regulación del uso sostenible de los recursos naturales de la zona.
QUINCE ASPECTOS CLAVE PARA LOS CIENTÍFICOS
1 Acuíferos. Evitar los elevados volúmenes extraídos en la desalación privada; la elevada carga de contaminantes agroquímicos que recibe el acuífero Cuaternario por la agricultura intensiva; la descarga de esos contaminantes del acuífero al Mar Menor; y la comunicación entre acuíferos con sondeos. Análisis de la ubicación y caudales óptimos de bombeo en el acuífero para reducir el drenaje y la descarga subterránea al Mar Menor. Investigar con datos de satélite.
2Humedales. Fomentar el uso de humedales circundantes a la línea de costa como zona de descarga de las escorrentías y sumideros de nutrientes. Preservación íntegra de la Marina del Carmolí y los saladares de Lo Poyo o de la Playa de La Hita, mediante el cese de los vertidos de aguas eutrofizadas y una banda de amortigüación.
3Depuración y reutilización. Más control de las fuentes puntuales urbanas para reducir los aportes. Que el agua de las estaciones depuradoras (EDAR) no sea vertida a la rambla del Albujón, sino que aquéllas sean transformadas para que el agua sirva para riego o el efluente de las EDAR y los aportes puntuales agrícolas sean reconducidos con tuberías a una planta de tratamiento para la posterior reutilización. Desarrollar técnicas y tecnologías (por ejemplo fotoquímicas) para la reutilización de las aguas contaminadas, de cara a eliminar compuesto orgánicos recalcitrantes.
4Agricultura. Mejora y cumplimiento de los códigos de buenas prácticas agrícolas. Sistemas agrarios compatibles con la conservación de la calidad del agua. Reducir los residuos de la fertilización nitrogenada, con un buen programa de fertilización adaptado a cada planta (para reducir los nitratos que quedan en el suelo tras el periodo de cultivo).
5Uso del suelo. Análisis de riesgos en función de los usos del suelo actuales. Plan de gestión integrado del riesgo en función de los usos del suelo
6Suelos contaminados por la minería.Cualquier actuación en el Carmolí y Lo Poyo debe tener muy presente los riesgos por la presencia de vertidos mineros (metales pesados como plomo o zinc), en especial que lleguen a la cadena alimentaria. Recuperar suelos con material vegetal y animal (estiércol vacuno o purín de cerdo).
7Ramblas. Plan contra la erosión de los residuos mineros y su llegada al Mar Menor con motivo de lluvias a través de las ramblas del Beal y Ponce.
8Fauna y flora. Plan de reducción del impacto de actividades humanas en áreas de nidifación y refugio de aves acuáticas como la playa de La Hita, la Marina del Carmolí, Lo Poyo o las islas interiores. Eliminación de basuras y retirada de escombros, regulación y prohibición de vehículos en zonas sensibles y épocas críticas para la reproducción de aves, control de predadores (perros, ratas gaviota patiamarilla), o recuperación de zonas de (saladares, charcas o zonas de playa). Monitorización de la vegetación acuática sumergida, los macroinvertebrado y el fitoplacton.
9Navegación y pesca. Plan de control de las embarcaciones a motor y lucha contra el fondeo ilegal. Nuevas investigaciones sobre la proliferación de medusas. Más exigencia en los periodos de veda y tamaño mínimo legal de las capturas. Más iniciativas turístico-pesqueras.
10 Investigación coordinada. Red de monitorización única para todas las investigaciones, para poder comparar resultados.
FUENTE: 'El Mar Menor. Estado actual del conocimiento científico'. Fundación Instituto Euromediterráneo del Agua y Fundación Cluster, noviembre de 2009.
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