El PP saca adelante la aprobación inicial del nuevo Plan Urbano, que recibe el voto en contra del PSOE y la abstención de MC antes de un plazo de alegaciones de 3 meses
JOSÉ ALBERTO GONZÁLEZ/ La Verdad
El gobierno municipal echó mano ayer de su mayoría absoluta y sacó adelante en la Comisión de Urbanismo e Infraestructuras la aprobación inicial del nuevo Plan General de Ordenación Urbana (PGOU), que diseña el desarrollo urbanístico del municipio para treinta años. El PSOE votó en contra y Movimiento Ciudadano (MC) se abstuvo. El documento lo aprobará el Pleno el 9 de octubre y se abrirá un plazo de alegaciones de tres meses.
«Es un plan al servicio de los intereses generales, y no sólo de los empresarios. Es un instrumento de desarrollo económico, que prevé un gran crecimiento del suelo industrial; permite una ordenación del casco urbano y los barrios para eliminar obstáculos a la expansión natural de la ciudad y mejorar la calidad de vida en barrios como Santa Lucía o San Antón con avenidas grandes y más plazas y zonas verdes; y garantiza que los que quieran vivir y trabajar en las diputaciones podrán hacerlo», resumió el concejal de Urbanismo, Joaquín Segado.
En una rueda de prensa en el Palacio Consistorial, Segado recordó las principales cifras del plan, que recoge cambios respecto presentado hace tres años por el arquitecto José Seguí. Citó que hay suelo para construir 96.000 viviendas; de éstas, el 30% serán de protección oficial (VPO), aunque en las promociones para estas casas la Comunidad Autónoma obliga a reservar otro 25% del suelo a uso hotelero (el Ayuntamiento ve ilógico aplicar las Directrices del Litoral fuera de la costa); el suelo industrial aumenta en un 36%, gracias a la ampliación del Valle de Escombreras y a la unión de los polígonos de Cabezo Beaza y Los Camachos; se recalifican como suelo urbano 2,3 kilómetros de costa (de 112), en Cala Reona e Isla Plana y La Azohía; y quedan como no urbanizables 20 millones de metros cuadrados junto al Mar Menor.
Colegios y hospitales
Una de las claves es que el Ayuntamiento reserva terreno para infraestructuras, pero no para la mayoría de nuevos equipamientos (instalaciones deportivas, sanitarias o educativas). Éstos los deja al desarrollo de cada zona, que depende del mercado inmobiliario.
El concejal defendió el delimitar terrenos bajo el epígrafe de sistemas generales porque las administraciones que hagan las obras tendrán suelo disponible; y porque el Ayuntamiento se ahorrará dinero y trámites; en vez de expropiar, compensará a los dueños con metros edificables.
Entre las nuevas carreteras están la ampliación de la de Canteras con dos carriles por sentido hasta el cruce de El Portús (sobre la rambla de Canteras); las circunvalaciones norte de Cartagena-Camino del Sifón (desde Los Dolores hasta Torreciega), de Molinos Marfagones (la ampliación de la N-332-1) y de La Palma (la variante de la F-36); y el desdoblamiento de la F-35 y su enlace con la AP-7 (Cartagena-Alicante).
También se prevé desviar las vías del tren de los núcleos rurales y hacer un intercambiador o estación para diferentes transportes entre Alumbres y Roche, junto al almacén de Tubacero.
En cuanto a los equipamientos, Segado dijo que sería «absurdo» plantear ahora dónde estarán, porque quizás hay zonas que no se urbanicen en diez o quince años.
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