CARTAGENA. / Diario El Faro
El proyecto de Novo Carthago, el único de gran tamaño que se mantiene al borde del Mar Menor para la construcción de 6.000 viviendas, está paralizado.
Así lo admitió ayer el vicealcalde de Cartagena, Agustín Guillén, tras confirmar que se ha permitido la retirada de avales de una de las empresas promotoras de las obras, “en vista de que la ejecución puede demorarse varios años”.
Guillén explicó que se ha considerado que “no tiene sentido que esas sociedades mantengan bloqueado como garantía una gran cantidad de dinero mientras no se apruebe el proyecto de urbanización”, que permitirá la posterior contratación de las obras. El último trámite completado por Urbanismo fue, a primeros de este año, la aprobación definitiva del plan de reparcelación.
“Estamos hablando todavía de varios años hasta que se comience el proyecto y quizás incluso una década hasta que las viviendas estén ocupadas”, apuntó Guillén.
El de Novo Carthago fue el único proyecto que se salvó de la declaración como no urbanizable de toda la ribera cartagenera del Mar Menor, decretado por la alcaldesa en 2006. Incluye, además de las viviendas, 1.500 plazas hoteleras y campos de golf.
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