La Verdad/ Cartagena
Las previsiones de los empresarios del polígono industrial Cabezo Beaza en junio del pasado año ya eran poco alentadoras. Calculaban que a finales del 2008 se cerrarían varias empresas y se perderían unos dos mil puestos de trabajo. Pero con el recrudecimiento de la crisis y la negativa de los bancos a conceder o renovar créditos financieros esa cifra se ha multiplicado casi por dos.
El presidente de la Asociación de Empresarios de esa zona industrial, José Javier Gómez-Vizcaíno cree que durante el último año han podido ir al paro hasta cuatro mil trabajadores y cerrado más de una docena de negocios.
«La situación está siendo especialmente preocupante en Cabezo Beaza. Se están cerrando muchas empresas y en casi todas se han reducido las plantillas drásticamente», explicó a este diario Gómez-Vizcaíno. Negocios como la franquicia española de una cadena francesa dedicada al autoservicio de papelería, material y muebles de oficina, una tienda de electrodomésticos, los comercios Maxi Día o Inter Sport, así como un restaurante chino y la tienda de animales de la zona han sido algunos de los que han tenido que echar el cerrojo.
En el polígono trabajaban a diario alrededor de quince mil trabajadores en más de mil empresas, lo que originaba continuos problemas de atascos. «Con la reducción considerable del número de trabajadores hasta las colas en los accesos en las horas punta del día se han acabado», aseguró Gómez Vizcaíno.
Más liquidaciones
Se han cerrado ya al menos una docena de empresas de servicios, sobre todo, las creadas hace dos años, aprovechando el tirón de la zona comercial y de ocio Parque Mediterráneo. «Y más que se seguirán cerrando», vaticinó Gómez-Vizcaíno. La próxima en echar el candado será la tienda de complementos de hogar Nido (cercana a Media Markt), que estos días ha colgado los carteles de liquidación por cierre.
Los únicos que aguantan el tirón del descenso vertiginoso del consumo son empresas grandes ya consolidadas. Aún hay negocios que siguen siendo rentables, pero otros, como los de nueva creación, se ven obligados a despedir a sus trabajadores porque el banco no les renueva el crédito. Esta es una de las principales quejas de los empresarios.
«Si se concedieran más préstamos, éstos seguirían con sus negocios y no se despediría a tantos trabajadores», explicó el presidente de los empresarios.
El único mensaje de aliento que, según Gómez-Vizcaíno, pueden recibir ahora mismo los empresarios de Cabezo Beaza es que vuelvan a recuperar el crédito. «Esto es inaguantable para la pequeña y mediana empresa del polígono. Lo peor de todo es que esto aún no ha tocado fondo. Creo que lo peor está por llegar», aseguró.
Préstamos del ICO
A este respecto, el presidente de la Cámara de Comercio de Cartagena, Mariano Rosique, se mostró a favor de las declaraciones del presidente de los empresarios de Cabezo Beaza, ya que en su opinión los máximo responsables de que se estén perdiendo tanto empleos son los bancos.
Criticó que a pesar de la publicidad que se ha hecho de los créditos financieros procedentes del Instituto de Crédito Oficial (ICO), «éstos no llegan a las empresas». Los únicos, aseguró, que están teniendo algo de relevancia son los otorgados por la Comunidad Autónoma a través de Undemur o Financia Pyme del Instituto de Fomento, pero el problema es que al final quien decide son los bancos».
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