El Ayuntamiento baraja que solo sea de rotación ante la poca demanda entre los residentes
26.12.12 - 00:35 -
EDUARDO RIBELLES |/ La Verdad
El aparcamiento de la Avenida de América abrirá en septiembre de 2013 con casi todas sus plazas abiertas al estacionamiento en rotación, según los nuevos planes que se ha marcado la empresa que lo construye y lo gestionará durante los próximos 70 años, la constructora González Soto.
El proyecto de sacar al mercado una parte importante de las 301 plazas totales se antoja ahora como una quimera ante la ausencia de reservas. «Solo hay unas 30 personas que se han interesado por hacerse con una y simplemente para figurar en lista de espera, sin hacer ningún desembolso previo», explicó el ingeniero encargado de las obras, Antonio Quiles.
El aparcamiento cumplirá en enero un año en construcción y debe estar terminado y en funcionamiento tras el verano de 2013. «Estamos cumpliendo con los plazos. Tenemos la primera fase concluida desde el pasado otoño, acabaremos la segunda en marzo y la tercera debe estar terminada en julio, para realizar posteriormente la obra de reforma de la calle», indicó Quiles.
La primera etapa, correspondiente a la construcción del aparcamiento entre la plaza Bastarreche y la calle Lope de Rueda, tiene ya totalmente cubierta su estructura de hormigón. En su interior se puede ver perfectamente cómo será la distribución de plazas y accesos. Actualmente se trabaja sobre la losa del fondo en el tramo hasta el final de lo que antes era el bulevar de la avenida. Es la segunda fase. Y una vez completada, con el inicio de la primavera, se abordará la última sección, más pequeña, bajo lo que es ahora la plaza de México, frente a la estación de ferrocarril. En estos momentos la obra se encuentra al 60% de ejecución.
Sin restos arqueológicos
«No hemos encontrado ni vamos a encontrar restos arqueológicos. Todo indica que la vía romana de entrada a la ciudad que algunos presumían que podía aparecer por aquí está más allá de la terminal ferroviaria», explicó el ingeniero. Esto era lo previsible después del exhaustivo proceso de 54 sondeos geológicos realizados en otoño del pasado año y de las decenas de catas de cinco metros de profundidad que se llevaron a cabo posteriormente a todo lo largo de la avenida Tampoco ha habido, hasta ahora, dificultades con las aguas subterráneas, aunque es previsible que surjan en cantidad cuando se aborde el último tramo, a más bajo nivel, ante la fachada de la estación de tren. La empresa cuenta con un sistema de bombeo para evitar que eso suponga un problema.
Cuando se complete la obra del aparcamiento, que abarca 212 metros de largo por 32 metros de ancho, se habrán empleado unos 25.000 metros cúbicos de hormigón y hasta 700 toneladas de hierro. Actualmente trabajan allí veinticinco obreros. Y todo eso tiene un precio, alrededor de 3,8 millones de euros, que González Soto tiene que sufragar únicamente con recursos propios, dado que no consiguió ningún tipo de financiación externa.
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