El Congreso dice 'sí' a una petición de IU para acabar con la limitación de acceso a los socios del Taibilla
24.11.10 - 00:48 -
J. A. G. | CARTAGENA./ La Verdad
El pulmón urbano de Tentegorra alberga unas instalaciones de ocio y deporte muy populares entre los cartageneros, pero que lo serán mucho más gracias a al histórico paso que acaba de dar el Congreso de los Diputados. A propuesta de Izquierda Unida (IU), los presupuestos generales del Estado de 2011 incluirán una partida de 50.000 euros para revisar el reglamento del Parque Rafael de la Cerda y acabar así con la limitación de acceso a las personas autorizadas por su propietario, la Mancomunidad de Canales del Taibilla.
En la actualidad, este organismo, que depende del Ministerio de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, tiene concedidos 21.000 permisos para trabajadores y amigos y familiares de éstos. Sin embargo, IU ha traslado al Parlamento nacional las quejas de ciudadanos que consideran el reglamento discriminatorio por no permitir el paso a una instalación de un organismo público a cualquier persona que lo desee previo pago del importe fijado para costear en parte el mantenimiento.
«Se trataría de revisar el reglamento, transformando su acceso en libre, previo pago de un precio público, sin discriminación de raza o parentesco y, tanto sólo, limitando su capacidad», expone la enmienda impulsada desde Cartagena por el coordinador local de IU, Cayetano Jaime Moltó.
En sus cerca de 8.000 metros cuadrados, el parque Rafael de la Cerda no sólo ofrece un privilegiado ambiente natural con abundante vegetación de pinos y otras especies, sino que tiene merenderos, zona de juegos infantiles, un campo de fútbol, otro de bolos cartageneros, dos piscinas, vestuarios y cinco pistas de tenis, una polideportiva, una de patinaje y una de baloncesto.
La normativa de uso se aprobó hace más de tres décadas. En principio el parque se pensó sólo para los empleados del organismo encargado de abastecer de agua potable a los municipios del Sureste español (ahora sirve a 79 municipios de la Región de Murcia, Alicante y Albacete), pero se amplió a personas del entorno de aquéllos.
Sin embargo, el aumento de cartillas derivó en una situación interpretada por la dirección del Taibilla como de saturación. Sólo se permite la entrada simultánea a unas ochocientas personas, así que empezaron las restricciones a una decena de personas por carné.
Ahora, aunque los nuevos responsables de la Mancomunidad dicen ser más flexibles, IU y PSOE ven llegada la hora de renovar el reglamento para actualizarlo a los nuevos tiempos.
Quieren que no haya un «acceso restringido a unas pocas miles de familias que ni guardan relación directa de consanguinidad con los empleados de la Mancomunidad, ni obedecen a criterio objetivo alguno».
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