La Verdad
El dúo de cómicos divierte durante media hora con sus chistes sobre el Molinete y las rotondas de la ciudad.
Los Romanos que van a morir te dicen: ¿tú sí que vales!». Con esa referencia al programa de Tele 5 que protagonizan actualmente comenzaron anoche Los Morancos el pregón inaugural del Año XIX de fiestas.
Esas palabras fueron suficientes para caldear el ambiente y arrancar las primeras carcajadas de las cinco mil personas que abarrotaron la plaza del Ayuntamiento y las calles que rodean el Palacio Consistorial.
No cabía ni un alfiler.
En el balcón hablaron todos: la alcaldesa, Pilar Barreiro, el presidente de Tropas y Legiones, Antonio Madrid, que entregó la distinción de Festero Honoris Causa al vicepresidente primero de Caja Mediterráneo, Ángel Martínez Martínez, el sufeta Ramón Jérez, la presidenta del Senado, Toñi Moreno, y por supuesto los cómicos Jorge y César Cadaval
Todos querían escuchar al dúo cómico sevillano, quienes protagonizaron el pregón más desternillante que se recuerda. Rieron autoridades, festeros y público que se acercó más por los protagonistas del acto que por el acto en sí.
Los pregoneros, que llevaban un papel casi en blanco, se dedicaron a hilvanar chistes y chascarrillos. Segundos antes de salir al balcón, cogieron de Aníbal y Escipión sus cascos.
No fue lo único que tomaron prestado: también adoptaron las personalidades de los generales y comenzaron a lanzarse acusaciones.
«Os ganamos en todas las competiciones porque los carthagineses somos mejores deportistas», decía Jorge mientras su hermano César le respondía que «era porque hay mucho funcionario entre los romanos».
Muchos personajes
Los pregoneros mezclaron historia con actualidad y pocos personajes conocidos se libraron de sus bromas.
Zapatero, el Rey Juan Carlos I, el Príncipe Felipe y Aznar fueron algunos de los protagonistas de sus bromas. Tampoco se libró la alcaldesa Pilar Barreiro quien a un escasos metros le pidieron varios favores para la ciudad.
«Señora motores, de apellido Barreiro. No haga más rotondas y badenes que he dado tres vueltas y he acabado en Murcia», gritaron los humoristas quienes minutos después le preguntaron: «¿Cuándo vamos a arreglar el Molinete?» entre el aplauso y las risas de los asistentes.
Tampoco la crisis se libró de sus sarcasmos. Jorge Cadaval aseguró «que la cosa está tan mal que me han cortado la luz del coche».
Con la gente ya entregada y con casi treinta minutos de continuas carcajadas, Los Morancos se despidieron con varias canciones. Sin embargo, las sorpresas no habían acabado ahí: César Cadaval, que cumplía años ayer, escuchó sorprendido cómo el público coreaba al unísono el cumpleaños feliz.
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