No firmaremos la rendición

UGT, CC OO y Sterm vuelven a llenar la Gran Vía tras la ruptura de la negociación y el desmarque del resto de sindicatos

Los convocantes cifran la participación en 40.000 personas, menos que la marcha anterior

La octava manifestación contra el 'tijeretazo' volvió ayer a desbordar la Gran Vía de Murcia con miles de manifestantes. Fue la respuesta de UGT, CC OO y Sterm-Intersindical al Gobierno regional tras la ruptura de las negociaciones, y su mensaje fue coreado durante la marcha y en el manifiesto final: «Nosotros no firmamos».

Faltaron las banderas de SATSE y ANPE, que se han desmarcado de las protestas tras aceptar la oferta del Ejecutivo. Su ausencia se notó -los convocantes hablaron de 40.000 asistentes a la marcha, frente a los 60.000 de la concentración anterior- pero en todo caso UGT, CC OO y Sterm demostraron que mantienen su capacidad de movilización. La protesta partió esta vez de la Circular, y cuando la cabecera superaba ya la plaza de Santa Isabel, abandonaban la Redonda los últimos manifestantes. Y cuando los líderes sindicales dejaban atrás el Ayuntamiento, en la Glorieta, los furgones de la Policía Nacional que hacían de 'coche escoba' dejaban la plaza Fuensanta para enfilar la Gran Vía. Es decir, los sindicatos volvieron a llenar por completo la arteria principal de la capital murciana.

«El maquillaje del Gobierno regional es insuficiente, y la sociedad demuestra que está de acuerdo», aseguró Antonio Jiménez, secretario general de UGT. Pese a que «ha habido avances» en las negociaciones, se mantiene «la violación de derechos fundamentales», denunció. Advirtió de que los recortes supondrán «que 2.200 empleados pierdan su puesto de trabajo». Daniel Bueno, secretario general de CC OO, aseguró que 760 trabajadores del Servicio Murciano de Salud ya están en la calle por el 'tijeretazo'. Anunció, además, que «si los trabajadores nos piden una huelga general, lo tendremos en cuenta».

Toni Carrasco, portavoz del tercer sindicato convocante, el Sterm-Intersindical, defendió que «los cambios que propone el Gobierno regional son secundarios; lo fundamental se mantiene». Los sindicatos mantienen como «irrenunciables» aspectos como la vuelta a las 35 horas de jornada laboral.

Docentes y sanitarios

Pese a que no estaba entre los organizadores de la marcha, el SIDI (que representa a docentes) acudió finalmente, y se pudieron ver sus pancartas en la Gran Vía. También ha rechazado finalmente la propuesta del Ejecutivo SAE, que representa a los auxiliares de enfermería.

La postura del resto de organizaciones que ya han firmado los acuerdos fue muy criticada por los asistentes. «Estaba afiliado a ANPE pero ya no lo estoy desde esta mañana», aseguró Juan Francisco Soto, maestro de Primaria. También acudieron sanitarios, pese al desmarque de las principales organizaciones del sector. «El Gobierno busca paz social hasta las elecciones, pero me preocupa lo que pueda pasar después», advertía Pepe Martínez, médico de familia.