La Iglesia confirma que el ex hermano mayor no cometió irregularidades y le abre la puerta para volver a presentarse a la reelección en dos años
27.07.10 - 01:28 -
G. MÁRMOL CARTAGENA. / La Verdad
El Obispado de Cartagena se reafirma en qué la decisión de relevar a la directiva de la Cofradía California fue la correcta, aprovechando la implantación de unos nuevos estatutos. Pero ahora trata de poner paños balsámicos para que las heridas levantadas por esa sorprendente intervención escuezan un poco menos.
El delegado diocesano de Hermandades y Cofradías, Silvestre del Amor, se reunió ayer con los hermanos mayores marrajo, del Resucitado y del Socorro, así como con el nuevo californio, Juan Carlos de la Cerra, para pedirles que apoyen a la Cofradía California y a la Iglesia. De lo hablado en la sede de la Cofradía Marraja no ha trascendido nada. El Obispado pidió discreción a todos los participantes para no avivar polémicas.
Juan Manuel Moreno Escosa no fue convocado a la reunión pero se mostró algo más calmado tras saber que el obispo, José Manuel Lorca Planes, envió a primera hora un comunicado dejando claro que el relevo de la directiva california no se debió a irregularidades de ningún tipo, sino a la creencia de que una junta gestora tendría mayor libertad para implantar los nuevos estatutos y abrir el periodo electoral en todas las agrupaciones.
Agradecimiento episcopal
El Obispado lo dejó claro: «Con este comunicado se quiere salir al paso de cualquier sospecha que pudiera inducir a pensar que se aleja del cargo de hermano mayor a don Juan Manuel Moreno Escosa por alguna presunta irregularidad cometida durante su gestión. Por el contrario, el señor obispo le reitera, una vez mas, el agradecimiento de la Iglesia Diocesana por los años que ha trabajado en pro del mayor engrandecimiento de la Cofradía California, agradecimiento que hizo público ante los medios de comunicación el día 23 de Julio...»
Moreno Escosa insistió ayer que él tiene un prestigio profesional labrado durante muchos años de trabajo y que la drástica medida adoptada por el Obispado estaba sirviendo para sembrar dudas incluso sobre su honorabilidad personal y capacidad laboral.
«Me siento ofendido, dolido y herido, y una persona que está herida puede hacer daño. No es mi deseo, porque también me hago daño a mí mismo, pero no consentiré que se ponga en duda mi prestigio e iré hasta el final con todas sus consecuencias», declaró a 'La Verdad'.
El destituido hermano mayor californio también abundó en su creencia de que el decreto episcopal tiene su origen en las peticiones que Silvestre del Amor le hizo para que admitiera a cuatro hermanos de la Agrupación de San Juan expulsados como californios.
«Me lo pidió por primera vez en la víspera del Viernes de Dolores. Me lo volvió a pedir antes de la Semana de la Cofradía. En los dos casos le dije que las expulsiones habían sido aprobadas en cabildo, que no eran una cosa mía, y que había que cumplir lo aprobado», explicó Moreno Escosa. Además, matizó que a los hermanos sancionados nadie les prohibió participar en los actos litúrgicos de la cofradía de asistencia libre y voluntaria.
Silvestre del Amor evitó entrar en polémicas y en referencia a esas peticiones para readmitir a los californios expulsados, ya que para él son detalles internos que no deben tener trascendencia pública. En cuanto a la situación de Moreno Escosa, el delegado de Hermandades y Cofradías insistió en el relevo de la directiva se hizo entendiendo que era lo mejor para facilitar las elecciones en todas las agrupaciones y dejó la puerta abierta para que Moreno Escosa se presente a hermano mayor en las próximas elecciones. El sacerdote aseguró que la decisión adoptada con la Cofradía California no debe entenderse como un castigo a nadie.
Pide perdón
Juan Manuel Moreno Escosa también pidió disculpas por las declaraciones recogidas en la edición del pasado domingo de 'La Verdad' en las que dijo: «Yo, lo único que he hecho ha sido expulsar a cuatro golfos y sinvergüenzas de la cofradía. Lo único que he hecho ha sido quitar maleza». Ayer, el ex hermano mayor rectificó: «Donde dije digo, digo Diego. Pido perdón, no debí decirlo».
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